Conoce cómo funciona tu corazón

El corazón cumple con la función de hacer llegar la sangre a cada órgano del cuerpo, con lo que proporciona oxígeno y nutrientes al cerebro, riñones, hígado, páncreas, pulmones y demás.

Para cumplir con dicha función, el corazón debe tener:

1. Fuerza contráctil: Es decir, la capacidad de bombear con la fuerza suficiente.
2. Capacidad: El volumen de  sangre que puede llegar al corazón para luego ser impulsada fuera de él hacia el resto del cuerpo
3. Sincronía: El corazón tiene un sistema de conducción propio, como un cableado eléctrico que coordina cómo latir.
4. Función valvular: Tal y como muchos sistemas de propulsión hídrica (como los acueductos, por ejemplo) el corazón requiere de válvulas que impidan que la sangre haga flujo inverso (se devuelva), lo cual impediría cumplir su función adecuadamente.

Pese a la grandeza de la naturaleza, se suelen presentar complicaciones, por lo que explicaremos las principales enfermedades que afectan este:

Hipertensión arterial: la presión arterial es producida por la fuerza que genera el corazón al impulsar la sangre, así como la resistencia que oponen las arterias a que ésta fluya. Dicho de otro modo, la presión arterial depende tanto del corazón como de las arterias.

• La hipertensión arterial como tal se define como una presión mayor o igual a 140/90 mmHg: ésta se mide por medio de un tensiómetro, del cual existen manuales y automáticos.
• Síntomas: Usualmente la hipertensión arterial es asintomática (no produce síntomas) hasta que causa un daño severo, usualmente se manifiesta a nivel renal (riñones) o cardíaco (sobre el corazón). La razón por la que esto sucede la podríamos equiparar a una tubería de acueducto; cuando la presión que se bombea es muy alta, no nos damos cuenta si no hasta que una de las tuberías se rompe, enterándose “cuando el daño ya está hecho”. De ahí la importancia de asistir a controles médicos al menos cada 6 meses (o según lo defina su médico tratante).
• ¿Cómo prevenirla?:  la mejor forma de prevenir la HTA es cuidar el corazón, esto se consigue evitando el consumo excesivo de grasas de origen animal, realizando actividad física o ejercicio cardiovascular mínimo durante 30 minutos 5 veces a la semana.
• Evitar el consumo excesivo de carnes rojas, carbohidratos (pan, harinas, papa, yuca).
• Evitar la obesidad, la cual se ha relacionado directamente con el desarrollo de enfermedades cardiovasculares (la HTA es una enfermedad cardiovascular).

Enfermedad coronaria: El corazón, al ser un músculo también necesita de nutrientes y oxígeno para funcionar, lo cual implica que debe tener un sistema de arterias que le suplan de sangre con cada uno de sus propios latidos. Estas arterias son muy importantes y se denominan arterias coronarias.

La enfermedad coronaria a su vez comprende:

1. Angina de pecho: Alguna vez ha sentido el dolor de hacer ejercicio más allá de la capacidad de sus piernas o brazos? ese dolor se produce porque el músculo excede la capacidad de las arterias que lo suplen de oxígeno y nutrientes, lo cual produce el aumento de sustancias de desecho (lactato) las cuales, entre varias causas, generan el dolor que se siente con la actividad física. De igual manera, puede suceder que las arterias del corazón (coronarias) se “taponen” con el exceso de grasa que se ingiere en la dieta, lo cual produce que cualquier esfuerzo del corazón (como correr un poco) exceda la capacidad de dichas arterias para suplirlo de energía y oxígeno, generando lactato y demás sustancias que conllevan al dolor que se conoce como “angina de pecho”
2. Infarto agudo de miocardio: Más comúnmente conocido como “infarto” (aunque un infarto puede suceder casi en cualquier lugar del cuerpo) no es menos que una parte del corazón o de tejido miocárdico que muere por falta de irrigación sanguínea (cuando las coronarias o una de ellas se obstruye completamente, por ejemplo). Si el tamaño del tejido que muere es pequeña, el corazón puede seguir funcionando para mantener a la persona viva, de forma muy delicada y susceptible pero funcional. Por otra parte, si dicho tejido es grande u ocupa un lugar importante del corazón, éste puede detenerse completamente; lo que generaría la muerte.

• ¿Cómo prevenir la enfermedad coronaria (angina e infarto)? Al igual que la HTA, se debe realizar actividad física, evitar consumo excesivo de grasas, carbohidratos y carnes procesadas. Por otra parte, existen factores como el tabaco (cigarrillo) que generan lesión sobre las coronarias y el sistema cardiovascular en general.

Enfermedad arterial oclusiva periférica: Al igual que ocurre en el corazón, las arterias que llevan sangre desde éste hacia las extremidades, son susceptibles de obstruirse por muchas causas, una de ellas placas ateromatosas (de grasa) que las obstruyen parcial o completamente.

• Síntomas: Cuando la obstrucción es parcial, los síntomas inician con dolor en la extremidad comprometida luego de una actividad física pequeña. Y cuando la obstrucción es completa o casi completa, puede generarse la muerte de la extremidad, que genera dolor intenso y requiere amputación de la extremidad.

• ¿Cómo evitarla? Ver las recomendaciones dadas para HTA y Enfermedad coronaria.

Insuficiencia cardíaca: Una de las enfermedades más incapacitantes del sistema cardiovascular es la insuficiencia cardíaca, la cual es a grosso modo la disfunción parcial del corazón para bombear las necesidades básicas  de irrigación sanguínea del organismo. Cuando la disfunción excede la capacidad del cuerpo para tolerarlo se genera “insuficiencia cardíaca” que no es más que el fracaso del corazón en el cumplimiento de su función. Algo así como un motor que simplemente no es capaz de mover el carro.

• Síntomas: Inicialmente, cansancio fácil, con actividades físicas extenuantes. Posteriormente, el cansancio (más comúnmente referido como fatiga) se presenta incluso con actividad física mínima como barrer, e incluso peinarse. Incapacidad para dormir acostados: Las personas con falla cardíaca deben dormir sentados dado que el corazón en su incapacidad de bombear sangre adecuadamente, permite que ésta se remanse (se acumule) en los pulmones, provocando una sensación de asfixia o ahogo que no desaparece hasta que la persona se siente (insuficiencia cardíaca congestiva). También puede generarse dolor abdominal, el cual se debe a que tal y como sucede en los pulmones, la sangre se acumula en el hígado, haciendo que éste se hinche y dicha hinchazón sea dolorosa.
• Otra consecuencia grave de la ICC (insuficiencia cardíaca congestiva) es el Infarto cardíaco, del cual es difícil recuperarse con una enfermedad cardíaca tan grave. Dicho de otra forma, un infarto en una persona con ICC puede generar la muerte más fácilmente que en una persona sin falla cardíaca. 
• ¿Cómo evitar la insuficiencia cardíaca? La insuficiencia cardíaca y la consecuente falla cardíaca, son producto de una hipertensión arterial no controlada, con tratamiento abandonado o mal tratada. Como se dijo previamente, la HTA no suele generar síntomas, pero cuando los genera, puede debutar como una insuficiencia cardíaca. Otra causa es el tabaquismo que produce lesión pulmonar, luego miocárdica y valvular (cor pulmonale) y puede llevar a ICC (insuficiencia cardíaca congestiva). Las recomendaciones están dadas, una dieta rica en frutas, verduras y baja en grasas, carnes procesadas y tabaco. Una recomendación universal ha sido denominada “el plato de Harvard” dado que la propuesta fue realizada por la Universidad que lleva ese nombre. 

Resulta en un ejemplo fácil para preparar un plato saludable que asociado a actividad física diaria, será de gran ayuda a la hora de evitar las enfermedades cardiovasculares. 

Finalmente, si ya tienes medicamentos para controlar alguna de éstas enfermedades; HTA (hipertensión arterial) por ejemplo; es importante NO suspender su uso, ya que estos evitan la progresión a enfermedades mayores y más difíciles de tratar como falla cardíaca e infarto de miocardio.

Referencias:

The New England journal of Medicine/ Smoking and Mortality - Beyond Established causes

The New England journal of Medicine/ Adolescent Overweight and Future Adult Coronary Heart Disease

Department of Nutrition, Harvard School of Public Health, www.thenutritionsource.org, and Harvard Health Publications, www.health.harvard.edu.